Allá en mi pueblo hay nieve, tristemente murmuró,
Y el oro de su pelo entre sus manos escondió,
Después alzó los ojos y me dijo con dolor
La nieve sepultó mi corazón.
Fue por su pena y mi pena
Que nos unimos y la amé,
Viviana se llamaba
Y una tarde se marchó,
Acaso ya Viviana me olvidó.

Las siete letras de su nombre
Las llevo aun en mi recuerdo,
Son siete estrellas en mi noche
Siete esperanzas en mi amor.
Acaso es tarde y sin embargo
Mientras espero que retorne,
Las siete letras de su nombre
El eco apagan de su adiós.

La luna está alunada, por tu ausencia, como yo
Tal vez porque vio el beso que su boca me dejó,
El viento reza un cuento mientras lento y solo voy
Bordeando la ribera sin su amor.
Ella se fue tras un sueño
Yo, sin mis sueños, nada soy,
Viviana se llamaba
Y una pena me dejó,
La pena de pensar que me olvidó.